A festejar Halloween con alfeñiques
"10% de descuento en disfraces, por Halloween" leí esta mañana en una juguetería. Me sorprendió; el descuento es una señal de que hay un mercado, bastante importante, en Tucumán, que festeja la noche de brujas. Una celebración que hace, seguro, 10 años apreciábamos como algo exótico en películas. También, me sorprende que los niños conozcan tan claro el concepto de "Halloween", más de lo que significa el bautismo, para los católicos, en general. Es pertubador como aceptamos costumbres foráneas con tan poca resistencia.
En una encuesta publicada hoy por Clarín online el 46,6% no veía con buenos ojos festejar tradiciones de otros países. Lamentablemente, como digo siempre, Dios nos crea y el marketing nos amontona.
posted by Luciana Poliche @ 3:45 p. m.
5 Comments:
Son pocas las tradiciones realmente autotóctonas.
A mi no me parece perturbador la velocidad de asimilación de las tradiciones ajenas que tenemos actualmente.
Lo que me parece, es que ahora simplemente "podemos" hacerlo. Tenemos la capacidad, debido a las herramientas de comunicacion que disponemos a nivel mundial.
Tal vez una pregunta mucho más interesante sería, por qué adoptamos algunas tradiciones y otras no?
Si, creo que tenés razón. Esa es la pregunta. Quizás, esas mismas herramientas de la que hablás hacen también más atractivas a unas celebraciones, que otras. Ese es otro punto a tener en cuenta. Saludos, bienvenido y gracias por comentar.
me parece que el alto nivel de globalizaciòn reinante, hace que existan cosas y tradiciones y modismos y yerbas varias, que ya no pertenecen a un sòlo lugar...
y la gente del otro extremo, pienso, se siente ciudadano del mundo, "celebrando" cuestiones tan alejadas de la cultura propia, inconscientemente, quizàs... o conscientemente, para tener una experiencia del primer mundo...
saludos,
Charls.
No son tradiciones, son modas.
Lo que se difunde es un estereotipo de celebración, sin el contenido simbólico original que dio lugar al recuerdo de esa fecha.
Comercio, comercio, comercio.
Concuerdo con mi amigo Amallio. POr eso se eligen las más rentable (como San Valentín), las que más puedan seducir a las masas.
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