Mujeres, raíces del mal


El otro día vi Malena, la película de Giuseppe Tornatore. Lloré como una enferma (Aclaración: siempre lloro con las películas, incluso en las de dibujos animados), pero ese no va ser el tema del post.
Si bien, la película me gusta mucho: me parece que esta filmada excelentemente y la música, que no podía ser de otro que Ennio Moricone, es increíble, me interesa mucho el rol de las mujeres solteras y atractivas en un sociedad.
Malena, caracterizada por Mónica Bellucci, es una morena italiana, de curvas generosas, que es el objeto de deseo masculino de todo un pequeño pueblo italiano.
Pese a que está casada, la ausencia del marido, por la Segunda Guerra Mundial, la hace aún más deseable.
La mujer no se mete con nadie. Hace su vida sin prestarle atención a lo que dice la gente. Se pasa los días cuidando de su padre y añorando a su marido.
Los problemas llegan cuando, luego de enterarse de que quedó viuda, un hombre casado se autoproclama su novio. El hecho llega hasta la corte del pueblo, ya que el adulterio es ilegal, que acrecenta el morbo de los ciudadanos y la envidia de las ciudadanas.
Sola, en medio una situación económica deplorable, la mujer sufre termendos abusos, hasta que toma coraje y decide cobrar por ellos.
Una vez que termina la guerra, las mujeres, que tanto la odian, van a buscarla, ya que no discriminaba y también atendía a los alemanas, y la dejan hecha girones, por lo que se va de la ciudad.
Luego, su marido (que no estaba muerto, estaba tomando caña lerelele) vuelve a buscarla. Averigua su paradero y años después regresan al pueblo donde circulan por la plaza.
Malena vieja y lastimada ya no es amenaza para nadie. Además es la mujer de su marido. Caminar del brazo la convierte a una mujer a quien hay que respetar.
El filme lo que deja en claro es que en esa época, y ahora también, muchas veces las mujeres, por no tener un hombre al lado, no son nada, no se merecen respeto. Peor si son lindas, porque lo que no pasa en la realidad pasa en la cabeza de la gente. "Cómo si es tan atractiva no va a tener a alguien. Si no se le conoce es porque es prohibido"; "A mí me tiro onda el otro día".
A su vez, cuando se decubren las fabulaciones y las fantasías todo se arregla con "Si el río suena es porque agua trae", excusa inventada por gente maliciosa, que no quiere aceptar que el chisme que hechó a correr es mentira.
Pero las grandes cómplices de estas situaciones, como bien los muestra la peli, son las mujeres (tendencia que estoy segura se está revirtiendo, porque cada vez son más inteligentes y no necesitan un hombre para reivindicarse en su rol), ya que a la mayoría les enseñaron a que existían gracias y para un hombre. Entonces, cuando sienten amenazado lo único que las legitima como mujeres, se encargan de defenestrar a su rival, reforzando las mentiras, porque es la única forma que tienen de pelear.
Al parecer en el imaginario, las mujeres somos el fruto de todos los males de esta tierra. Es bíblico, miren a Adán y Eva, sino. El cine se encargó de reflejarlo. Las damas son las que terminan el amor entre padres e hijos, amigos fraternos y hermanos. Somos las que llevamos a los hombres a romper las reglas, por el mal camino. Los corrompemos (Véase "Primavera, Verano, Otoño, Invierno y primavera", de Kim Ki Duk, por ejemplo), ¡¡¡¡Cómo si ellos no tuviesen voluntad!!!!! Si nenas, la tienen. Por eso, son igual de culpables cuando nos dejan por la mejor amiga.
Mi tía tiene un hijo que es un vago, que anda en cualquiera y siempre lo fue. Tenía una novia, a la que le iba bastante bien, que nadie sabe cómo y porqué se enganchó con él. La chica hacía su vida, él embobado hacía menos de lo habitual y ella era la culpable. "Esa chica es una mala influencia. No lo ayuda"
¿Desde cuando tenemos que criar a nuestras parejas?, que no es que madre hay una sola. Como me dijo Leonor Benedetto una vez: "En cuestión de mujeres, nada viene bien". Si nos ganamos a la suegri, lo fastidiamos para que sea lo que la madre quiere. Conclusión: nos dejan porque queremos cambiarlos. Y, si los queremos tal cual son, hasta malas personas, somos la mala influencia.
Lamentablemente, tengo que aceptar que es culpa nuestra chicas, porque por mucho tiempo tuvimos el monopolio de la crianza de los hijos y así salieron. El problema con el machismo no es los hombres; son las mujeres machistas.

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6 Comments:

At 8:10 p. m., Blogger amaliovilla said...

Hola muchacha, voy a tener que ver esa película (si encuentro cómo).

Claro que imagino que por ser italiana, la ciudad está consumida por un machismo firmemente afianzado en las raíces populares.

Y de paso, es usted casada?

Je.

 
At 9:03 p. m., Blogger Luciana Poliche said...

No, todavía no me casé. Esta en todos los videoclubes y la están pasando por Cinemax, este mes. Véala y digame que opina.

 
At 1:31 p. m., Blogger C. said...

No sabes como te comprendo! la vi hace poco y me agarró una angustia terrible en la escena que la golpean, unas ganas de matarlas a todas esas viejas habladoras de m***!!
Coincido perfectamente con lo que decís, nuestra función es ser compañeras no mamás.
Besitos!

 
At 8:03 p. m., Blogger amaliovilla said...

Bueno, aunque sea una mujer soltera, la voy a respetar como se merece. :-)

Gracias por el dato, aunque no tengo televisión, voy a ver cómo hago.

Eso sí, como crítico, no sirvo...

 
At 6:59 p. m., Blogger Luciana Poliche said...

Lo bueno de la críticva que, pese a quien le pese, es tu opinión ya pelase

 
At 11:49 p. m., Blogger ©Iv4n4 said...

Amé esa película...

 

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