Cartón lleno: el desempleo afecta más a las mujeres

No se que está tratando de hacer la mujer del dibujo, cuando trata de escribir sobre la pantalla de la PC. Quizás, ya se volvió loca de tantas cosas que tiene que hacer. Jajajaaj



"El ingreso al mercado de trabajo sigue siendo difícil para las mujeres tucumanas, en especial, para aquellas que se encuentran en edad reproductiva. Según los datos del Indec, la tasa de desocupación femenina fue del 10,3% en el Gran Tucumán-Tafí Viejo durante el tercer trimestre del año. Más profundo es el problema entre las mujeres de hasta 29 años, ya que el nivel de desempleo sube al 17,3%. En el país, el registro más alto de desocupación en la mujer correspondió al Gran Rosario (14%).La Encuesta Permanente de Hogares (EPH), difundida ayer por el Indec, también revela que en el Gran Tucumán-Tafí Viejo cedió levemente el trabajo en negro: alcanzó a 106.073 trabajadores, el 47,5% de los asalariados. En 2006, la tasa había sido del 51,9%.", La Gaceta 21/12/07


Siempre sostuve que el mundo laboral, que es parte de nuestra sociedad, no está preparado o no cambio el paradigma con que se rige, todavía, para incluir, en su totalidad, la fuerza de trabajo femenina.
Que las mujeres puedan trabajar, no significa que las empresas tengan en cuenta que las necesidades de las trabajadoras son diferentes, a la de los varones.
Los hombres y las mujeres somos estrepitosamente distintos. De eso no hay duda. Si todavía, no puedo develar el misterio de como terminamos en pareja, cuando tenemos formas de ver las cosas opuestas. A ninguno de los dos géneros les entra en la cabeza la cosmovisión del otro.

Este mundo exige por un lado y quita por el otro

En España, por ejemplo, el Estado está preocupado, porque pasaron de ser el país con mayor índice de natalidad, de Europa, al de menos. La población envejece; los pueblos son habitados por ancianos y las parejas, si deciden procrear, tienen un sólo hijo, en su mayoría.
Como no va ser así, si la mujer tiene hoy otras expectativas de la vida, en vez de quedarse cocinando en la casa, pero se convierte en un paria, dentro del mercado laboral, cuando está embarazada. Incluso, tiene que lidiar de que la comunidad, en algún punto, la llena de culpas por no dedicarse, exclusivamente, a la crianza de los hijos.
Mi amiga Sonia, que ni siquiera está esperando un hijo, fue discriminada por ser: mujer, católica y recién casada.
Había aplicado para un puesto, que prácticamente era de ella. A su vez, le pidieron que, por mera formalidad, tuviera una entrevista con el psicólogo laboral. Luego de la charla, el tipo le dijo "Tengo que ser sincero con vos. Con tus características: de recién casada y católica (mi amiga en su CV. había puesto que era lider de un grupo misionero, creyendo que eso le jugaba a favor) tenés altas posibilidades de quedar embarazada en menos de un año y eso a la empresa no le conviene", chuiiiiiiiiiiii. Sonia nos decía: "Me siento re mal, porque no creen en mi palabra. Yo les dije que no planeaba tener hijos, por ahora. Además, siento que esa era mi palabra, que yo había hecho un compromiso, pero no les importó".
Al parecer, traer un hijo al mundo es sinónimo de enfermedad o de bajo rendimiento, lo que es una mentira. Una mujer sana puede trabajar, normalmente, hasta dos o tres semanas antes de parir. Tengo colegas que se fueron a cubrir tiroteos, con 8 meses de embarazo.
Es verdad, que uno elige la profesión en que se va a desempeñar y asume los riesgos. No se, si mi objetivo en la vida es trabajar en un circo, para ser contorsionista, y entro a "Le Cirque du Soleil", lo más probable que no me embarace al mes de haber conseguido el puesto y, quizás, postergue mi maternidad. Sin embargo, hay otros empleos en donde se puede ser madre, paralelamente al trabajo.
A su vez, creo que las mujeres sufrimos este trato, gracias a una gran cantidad de compañeras de género, que son unas mediocres, que utilizan la maternidad para justificar, aún más, las ganas de no trabajar.
También, vi la otra cara de la moneda. Tuve una compañera de trabajo que usaba su condición hasta para no correr una silla. Ambas compartíamos la PC. Yo cambiaba la silla, porque ella usaba una que estaba muy arquedada, porque le resultaba cómoda. Cuando me iba, las sillas quedaban cambiadas. Un día llegué y, cobardemente, encontre sobre el teclado una nota que decía. "Por favor, tengo siete meses de embarazo y no puedo andar cambiando las sillas" ¿?.
Esa es la misma persona que, por su embarazo, fue la que menos trabajó durante el año, ya que a los siete mese le ordenaron, supuestamente, reposo porque creo que tenía placenta previa o algo así. Pese al diagnóstico, iba en el 118 un día de calor fulminante, salía de trabajar creca de las 20, y la veo por la Santiago, entre 25 y Laprida, paseando en un auto de prueba, con el marido. Vehículo que luego se compraron. Así como la vi yo, la pudo haber visto mi jefe. Lamentablemnte, después, por esas actitudes, pagamos todas, ya que nos juzgan con la misma vara.

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2 Comments:

At 8:33 a. m., Blogger María Julia said...

Hola!!!!! Escribo para desearte una FELIZ NAVIDAD!!!! Siempre paso a leerte. Espero que estes bien. Besitos

 
At 1:50 p. m., Blogger Luciana Poliche said...

Gracias María Julia, que vos tambié tengas unas felices fiestas

 

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