Esto es patético ¿O qué?


Había un vez, una pequeña comarca, en el noroeste de la República Argentina, llamada Tucumán donde existía la ley 7550 o "4 AM". El gobernador, quien padecía el síndrome de Hada Madrina, había dispuesto que los locales bailables debían tener horario de apertura y cierre y tampoco se podían vender bebidas alcoholicas, por lo que a las 4 de la mañana se rompía el encanto. Así, litros y litros de cerveza eran tiradas a los resumideros; mientras que, se clausuraban fiestas clandestinas y había que peliarse por tomar un remise que parecía un calabaza, para volver a casa.
Ahora bien, lo que entiendo por fiestas clandestinas son reuniones, que se hacen pasar por familiares, donde se cobra una entrada y la bebida se vende. Entonces, miren lo que se publicó hoy 2/1/08 en La Gaceta.


Título: Empezaron a bailar en el catamarán después de las 4


"Los motores del navío se encendieron después de las 4. La música Techno comenzó a sonar a pesar de que el viento y las olas sacudían la nave. En el catamarán Arquímides se realizó una fiesta para celebrar el Año Nuevo. A bordo del barco, que navegó por el dique El Cadillal, se vendieron bebidas alcohólicas y se montaron equipos de sonido y de iluminación.Alrededor de 50 personas participaron de este festejo, que se realizó bajo un cielo estrellado. 'Me enteré por mi cuñado, David Alperovich. Ellos organizaban la fiesta. Yo también invité a gente conocida. La ley de las 4 me parece mmm... no me parece. Acá vine con mis amigas Claudia, Silvia y Dani”, comentó Celeste Albornoz, de 20 años. Alperovich, el organizador del evento, explicó que la idea de festejar el Año Nuevo en el Arquímedes era mostrar la embarcación como un salón de fiestas alternativo a los que hay en la ciudad. 'No quisimos hacer mucha publicidad de la fiesta porque aquí se hace todo al revés”, dijo haciendo referencia a que el festejo podía ser clausurado. Efectivamente, conseguir una entrada no fue una tarea sencilla: las entradas se vendieron por adelantado en un ciber de barrio Norte y costaron $ 15. Los participantes relataron que tuvieron que ir al local, que parecía estar cerrado, y tocar el timbre. Cuando les abrían la puerta les preguntaban de parte de quién iban a comprar la entrada y ahí concluía el trámite"

A ver...el muchacho que organiza, según tengo entendido, es el sobrino del gobernador, José Alperovich. El chico acepta que las entradas se vendieron con un cuidado extremo, que no hubiese sido necesario de haber sido una fiesta legal. Se empezó a bailar después del horario estipulado de cierre, se vendieron entradas, bajo poncho, y se comercializó alcohol. Ahhh me olvidaba, ni siquiera intentaron hacerla pasar como fiesta familiar. Repito: "Alperovich, el organizador del evento, explicó que la idea de festejar el Año Nuevo en el Arquímedes era mostrar la embarcación como un salón de fiestas alternativo a los que hay en la ciudad.'No quisimos hacer mucha publicidad de la fiesta porque aquí se hace todo al revés', dijo haciendo referencia a que el festejo podía ser clausurado. ¿Este chico sabía que hablaba con la prensa?????
"Pocas horas después, la fiesta fue clausurada por el IPLA porque, según su titular, Alejandra Risso Patrón, estaban viendiendo bebidas alcohólicas". MMM ¿Cómo hicieron para llegar a la embarcación? ¿No estaba surcando las olas del Cadillal?

Nota 2, Título 2: El sol sorprendió a los jóvenes en fiestas privadas

"Miles de personas abandonaron sus hogares después del brindis en la madrugada de ayer en busca de un lugar donde celebrar el Año Nuevo. Al menos siete fiestas privadas -repartidas entre la capital y Yerba Buena- fueron el destino de muchos de ellos.Las dos más concurridos se realizaron en Yerba Buena y fueron clausuradas por el IPLA. En Andrés Villá al 400 al menos 400 personas bailaron hasta cerca de las 7. En una casa se había organizado una fiesta bautizada 'Happy Crazy & Chic New Year'. La música electrónica comenzó a sonar alrededor de las 3.30 y para entrar había que pagar entre $ 10 y $ 15. En el interior se vendía todo tipo de bebidas alcohólicas...'Como a las 3 nos trepamos por los alambrados y nos colamos, pero nos descubrieron y nos sacaron. Después pudimos pasar de nuevo, pero no daba para pagar $7 por la cerveza', relató José Luis Colombres. Alrededor de las 7 la diversión terminó. Los inspectores del IPLA, acompañados por 30 policías clausuraron la fiesta. 'Esto era un cumpleaños, una fiesta privada. Terminó en un desastre”, protestó Maxi, el disc jockey. “Esto era una fiesta familiar y hubo una irrupción ilegal de la policía sin orden de allanamiento', agregó Miguel Cipriani. Los inspectores secuestraron los equipos de sonido. Sin embargo, les costó trabajo, porque varios jóvenes se tiraron encima de los parlantes para evitar que se los llevaran. De todos modos, unos minutos después, concretaron el secuestro"
Debo decir que nunca pagué ni compré una cerveza en ningún cumpleaños que me invitaron. En fin estoy sorprendida con la naturalidad que pasan estas cosas en la provincia.

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1 Comments:

At 5:01 p. m., Blogger Calio said...

Cosa que detesto es que me traten como una imbécil, las noticias salen y todos lo sabemos, hay fiestas clandestinas cada fin de semana y son terriblemente peligrosas.
Pero claro, ahí los "adultos preocupados" no saltan porque no tienen idea.

Es todo un chiste.

besos

 

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